Hola, soy Roma, una gatita negra a la que rescataron con los ojos ensangrentados y con dos úlceras. Tras un tratamiento muy duro para mi corta edad, uno de mis ojos está genial pero el otro, la oftalmóloga dice que se ha quedado pigmentado. Ya no corro peligro ni son portadora de ningún virus, solo quiero una familia que me quiera por lo cariñosa que soy y por la vida que me merezco. Nadie se fija en mi por ser negra y por mi problema en el ojo, pero yo no lo entiendo. Soy muy buena y aunque al principio puedo ser un poco temerosa, con paté ya soy toda tuya. ¿Te animas a adoptarme y ser mi nueva familia?