Alí es un perro muy, muy activo, siempre en movimiento y con una gran necesidad de ejercicio y estimulación. Es independiente y desapegado, no es especialmente demandante con las personas, pero disfruta muchísimo del entorno y, sobre todo, de la compañía de otros perros, a los que persigue y con los que interactúa gran parte del día. En el día a día es un perro estable, aunque en situaciones de alta excitación puede necesitar una correcta gestión de las interacciones, ya que se intensifica fácilmente. Por ello, es importante que quien lo adopte tenga experiencia y sepa ayudarle a mantener la calma y el autocontrol. Alí encajaría perfectamente con una persona activa, con conocimientos en comportamiento canino, que le proporcione rutinas claras, ejercicio diario y un entorno donde pueda canalizar toda su energía de forma adecuada. No es un perro faldero, sino un compañero para alguien que valore su carácter independiente y quiera trabajar con él desde el respeto y la constancia. Alí no es para cualquiera, pero para la persona adecuada puede ser un gran compañero.