"Brutus es un cachorrón de mastín que llegó a la protectora junto a su hermana… pero ella ya ha sido adoptada, y él se ha quedado solo. Desde entonces está triste, desorientado y asustado. Aunque es grande en tamaño, Brutus sigue siendo un bebé: dulce, noble y con un corazón inmenso. Tiene algo de miedo, pero nunca ha tenido un mal gesto; al contrario, poco a poco empieza a confiar, a dejarse mimar… y a descubrir que no todos los humanos hacen daño. Sabemos que en un hogar amoroso, con paciencia y cariño, su evolución sería mucho más rápida. Por eso buscamos para él una familia urgente, donde pueda crecer sintiéndose querido, seguro y acompañado. Si tienes espacio en tu casa (¡y en tu corazón!), Brutus puede ser tu compañero fiel para toda la vida."