De la antigua vida de Zeus no sabemos mucho… solo que no fue buena. Llegó con un carácter un poco complicado, pero eso ya quedó atrás. Con paciencia, cariño y respeto, Zeus ha aprendido algo muy valioso: que no todos los humanos hacen daño. Hoy es un perro cariñoso, sociable y con muchas ganas de conectar. Le encanta el contacto humano y disfrutar de los pequeños placeres que antes no conocía. Eso sí, necesita una familia que le entienda, que sepa acompañarlo, respetar sus tiempos y seguir guiándolo con amor. Zeus está listo para dar el siguiente paso. Solo le falta un hogar. Si tú también crees en las segundas oportunidades, rellena el formulario de adopción y ven a conocerlo.