¿Cómo saber si un gato tiene fiebre?

Por desgracia, nuestros gatos también enferman y hay señales que deberían de ponernos en alerta. En este artículo nos centramos en saber si nuestro gatito tiene fiebre.

La forma más rápida de saberlo, al igual que ocurre con los humanos, es tomarles la temperatura. Para ello, deberás introducir entre 2 y 2,5 centímetros del termómetro en el recto. Esto no resultará agradable a tu gato, por lo que sugerimos que antes de realizar esta acción, le pongas un poco de vaselina. Recuerda que su temperatura corporal está entre los 38º y 39º, y si son bebés, 39,5º. Si su temperatura es mayor, indica que nuestro gato podría tener fiebre (a veces la temperatura les aumenta por otros motivos, principalmente estrés).

Si la temperatura corporal de tu gato alcanza los 41º significa fiebre alta y hay que llevarlo inmediatamente al veterinario para que investigue a qué se debe esa subida de temperatura.

¿Cómo saber si un gato bebé tiene fiebre?

Como hemos comentado arriba, la temperatura corporal de un gato bebé debe de ser de 39,5º. Al igual que los adultos, los gatos que son bebés deben de estar bien hidratados. Si se comportan de manera apática (apenas se mueven, hay falta de apetito…) puede ser síntoma de fiebre. Ten en cuenta que los gatos que apenas tienen un mes de vida todavía no son capaces de regular su temperatura correctamente, por lo que pueden sufrir hipotermia o fiebre. Para mantener su temperatura corporal puedes taparlos con mantas, pero no debes utilizar mantas eléctricas porque pueden provocarles quemaduras.

¿Cómo medir la temperatura a un gato?

El  mejor método para saber la temperatura exacta de un gato es mediante la vía rectal. Sin embargo, si ves que va a ser muy difícil o directamente imposible saber si tu gato tiene fiebre de esta manera, hay otra alternativa menos exacta pero igualmente válida, que es utilizando el termómetro auricular.

Recuerda que la temperatura corporal de un gato es más alta que la de los humanos, por lo que si el resultado da 39º, está dentro de la normalidad.

¿Cómo saber si un gato tiene fiebre sin termómetro?

Los gatos de por sí intentan no manifestar que se encuentran mal como una forma de protegerse frente a otros animales, incluso frente a otros gatos, por lo que puede estar arrastrando el problema durante semanas. Sin embargo, hay algunos síntomas que pueden indicar que nuestro gato tiene malestar y en ocasiones es derivado de la fiebre. Aquí te dejamos algunas señales de alerta:

  • Hocico seco y caliente: La nariz de los gatos suele estar húmeda. No siempre va a significar que el gato tenga fiebre, sin embargo, sí es un signo de alarma que no hay que pasar por alto.
  • Falta de energía: Si tu gato está enfermo, afectará a su comportamiento. Por lo general, tendrá una respiración y un ritmo cardíaco acelerados, ya que el hecho de no saber qué les ocurre y qué les provoca ese malestar les genera ansiedad (también es una reacción del organismo frente a la fiebre, para intentar liberar calor). Además, el estado de cansancio y malestar provocan una falta de apetito, por lo que la ingesta de agua y comida. Se verá bastante disminuida.
  • Falta de higiene: Los gatos son muy limpios, por lo que si descuidan su higiene, independientemente de si tienen fiebre o no, es síntoma de que algo no va bien.

Las causas por las que tu gato tiene fiebre suelen ser diversas: puede ser por cuestiones leves, como un resfriado, una gripe común o un efecto secundario de algún medicamento o vacuna, o por cuestiones graves, como enfermedades infecciosas, un traumatismo o la presencia de tumores.

Ahora ya sabes cómo tomar la temperatura a un gato, cómo saber si un gato tiene fiebre y cuáles son los síntomas provocados por la fiebre. Ante la más mínima sospecha de fiebre, es primordial que lleves a tu gato al veterinario. En clínicas Kivet lo atenderán e investigarán la subida de temperatura para buscar la mejor solución a su problema de salud.

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