Imágenes: Milagro Muñoz Araya
El mes pasado te contábamos la historia de Teddy, el perro que ayudó a su dueño a despertar del coma. Y hoy queremos contarte otra historia de heroicidad de mascotas que no te dejará indiferente. Queremos que conozcas la historia de la perrita llamada Chiquita, ¡toda una valiente!
Una perrita busca a su dueño herido entre el tráfico
La historia tuvo lugar en Costa Rica donde Milagro y su marido avistaron a una perrita cerca de la carretera desorientada e inmediatamente pararon el coche.Cuando se aproximaron a la perrita, les condujo hacia un hombre que estaba herido en el suelo. Cuando llegaron a él, ¡la perrita no paraba de lamerle! Gracias a ella, este matrimonio pudo llamar a una ambulancia.Cuando llegaron los médicos y vieron que el hombre no podía caminar, lo subieron a una camilla y lo metieron en la ambulancia y cómo no, Chiquita no se quedó atrás, ¡subió también a la ambulancia!
Una vez llegaron al hospital, los médicos solo dejaron que la perrita se despidiera de su dueño y la devolvieron al matrimonio que los había llamado, los cuales se encargaron de dejar a la perrita en manos de un vecino que la llevó a su casa.Al día siguiente, Milagro quiso ir a visitar a la perrita que ya estaba con su dueño en casa. Allí se dio cuenta de las condiciones de extrema pobreza en las que vivían. Para la suerte de Chiquita y su dueño, Milagro era veterinaria y se llevó a Chiquita a la clínica para hacerle un chequeo completo con análisis de sangre además de vacunarla, esterilizarla y desparasitarla. ¡Qué fantástica casualidad!
Después de leer una historia tan conmovedora como esta, seguro que te estás planteando como puedes ayudar a los animales más desfavorecidos que están buscando una nueva familia donde ser felices. Entra en nuestra web kiwokoadopta.org e infórmate como puedes colaborar con nuestras protectoras y asociaciones de animales a través de la Fundación Kiwoko. ¡No te imaginas todo lo que os podéis aportar mutuamente!