¿Te has planteado alguna vez si la comida que le das a tu gato es lo más natural para él? Hoy queremos hablarte de una tendencia que cada vez gana más peso en la nutrición felina: La comida congelada para gatos.
Sí, has leído bien. Y no hablamos de dejar una lata en el congelador, sino de una alimentación pensada para conservar la frescura y el valor nutricional de los ingredientes sin necesidad de aditivos.
Así que si estás buscando una forma más saludable y natural de alimentar a tu gato… ¡Sigue leyendo!
¿Qué es la comida congelada para gatos?
La comida congelada para gatos es una alternativa cada vez más popular dentro de la alimentación natural. Se trata de alimentos que, tras ser preparados, se congelan para mantener intactas sus propiedades nutricionales sin necesidad de conservantes artificiales.
Es una forma de ofrecerle a tu gato una dieta más fresca, sabrosa y adaptada a sus necesidades biológicas, que además te permite mantener la comodidad y seguridad en casa.
Tipos de comida congelada para gatos
Aunque el formato sea similar, no todas las comidas congeladas para gatos son iguales. Existen principalmente dos tipos:
Comida BARF congelada
La dieta BARF (Biologically Appropriate Raw Food) se basa en ofrecer al gato una alimentación cruda y biológicamente apropiada. En el caso de la versión congelada, hablamos de mezclas crudas equilibradas que vienen ya preparadas y listas para descongelar.
¿Qué suele incluir?
- Carne cruda (pollo, pavo, conejo…)
- Vísceras (hígado, riñón, corazón…)
- Huesos triturados o carnosos
- Verduras o frutas en proporciones seguras
Este tipo de comida se congela justo después de ser preparada, garantizando la frescura y evitando contaminaciones. Es ideal para gatos con una dieta basada en ingredientes crudos y sin procesos industriales.
Si ya conoces la dieta BARF para gatos y estás buscando cómo aplicarla de forma práctica y segura, esta opción es para ti.
Comida cocinada congelada
¿Y si tu gato no tolera bien lo crudo o es un poco más delicado con la textura y el sabor? Aquí es donde entra la comida cocinada congelada.
En este caso, los ingredientes se cocinan, se mezclan y se congelan inmediatamente.
¿Qué puede contener?
- Guisos suaves de carne o pescado
- Caldo natural con colágeno
- Verduras cocidas como calabaza o zanahoria
- Algún cereal digestivo como arroz (según la receta)
Es una opción ideal para gatos con estómagos sensibles, mayores o que necesitan una transición suave desde la alimentación industrial.
Ahora puedes darle a tu perro alimentación 100% natural en dos formatos pensados para su bienestar: BARF cruda congelada o recetas cocinadas congeladas. ¡Lo mejor de la comida natural, lista para servir!
Descubrir opcionesBeneficios de la comida congelada para gatos
Si aún tienes dudas sobre si es buena idea cambiar la dieta de tu gato, echa un vistazo a estos beneficios de la comida congelada para gatos:
Más frescura y sabor
La congelación permite que los ingredientes mantengan su sabor natural y valor nutricional sin necesidad de aditivos. Para tu gato, será como comer comida recién preparada.
Conservación sin químicos
Olvídate de conservantes artificiales o ingredientes “raros”. Este tipo de comida se mantiene en buen estado solo gracias al frío.
Mejora la digestión
Al tratarse de ingredientes más naturales y menos procesados, el sistema digestivo del gato trabaja de forma más eficiente. Muchos tutores notan menos vómitos, diarreas o malestar tras el cambio.
Pelo más brillante y piel más sana
Los ácidos grasos omega 3 y 6 presentes en ingredientes frescos ayudan a mejorar visiblemente el aspecto del pelaje y a reducir problemas dermatológicos.
Menos residuos y mejores heces
Las heces suelen ser más pequeñas, compactas y menos olorosas, ya que se aprovechan mejor los nutrientes y hay menos carga artificial.
Refuerzo del sistema inmune
Una alimentación más “real” mejora la salud general, pasando desde el sistema inmune hasta el equilibrio intestinal.
¿Cómo introducir la comida congelada en la dieta de tu gato?
Los gatos son animales de costumbres, y un cambio brusco puede provocar rechazo. Por eso, te recomendamos hacer una transición gradual:
- Empieza mezclando un 10-20% de comida congelada (ya descongelada) con su comida habitual.
- Aumenta la proporción poco a poco, durante al menos 7-10 días.
- Observa si hay cambios en su comportamiento, apetito o digestión. Lo ideal es que lo consultes con tu veterinario, sobre todo si tu gato tiene condiciones especiales.
En este post te lo explicamos con más profundidad “Cómo cambiar paso a paso la comida de mi gato”
💡 Truco útil: Si ves que no se la come, prueba a templar un poco la comida (sin calentar demasiado ni usar microondas directamente) para activar el aroma. ¡Muchos gatos no pueden resistirse!
¿Se puede combinar con pienso o comida húmeda?
¡Claro que sí! No hace falta eliminar por completo su alimentación actual si no lo deseas. De hecho, muchos tutores combinan:
- Pienso para gatos por la mañana
- Comida congelada por la noche
- O alternan días
Lo importante es asegurarse de que la dieta final sea completa y equilibrada. Algunas marcas de comida congelada ya vienen formuladas como dieta completa, mientras que otras son complementarias.
¿Cómo manejar correctamente la comida congelada?
Como todo producto crudo o cocinado, la higiene y conservación es esencial para evitar que se ponga malo, ya que puede afectar negativamente a la salud de tu gato. Por eso, es muy importante que:
- Descongeles siempre la comida congelada en la nevera, no a temperatura ambiente.
- No vuelvas a congelar si ya se ha descongelado.
- Una vez descongelada, consúmela en 24-48 h.
- Limpia bien los utensilios tras cada uso, sobre todo con BARF.
Preguntas frecuentes sobre la comida congelada para gatos
¿Puedo usarla como premio o complemento?
Sí. Aunque muchas fórmulas son completas, también puedes usar porciones pequeñas como complemento o premio saludable.
¿Y si mi gato tiene alergias?
Justamente una de las ventajas de esta comida es que puedes controlar mejor los ingredientes. Existen recetas mono-proteicas e hipoalergénicas ideales para gatos con alergias alimentarias.
¿Es más cara que el pienso?
A nivel de precio por kilo, sí suele ser algo más costosa. Pero muchos tutores consideran que los beneficios en salud, digestión y bienestar compensan con creces. Además, el consumo suele ajustarse mejor al apetito real del gato.
En conclusión, la comida congelada para gatos es una alternativa cada vez más presente en los hogares que buscan una nutrición más respetuosa con el instinto natural de su felino. ¿Y lo mejor? Que ahora es mucho más accesible y práctica que hace unos años.
¡Ven a Kiwoko y pregunta por este tipo de alimentación!
Si tienes alguna duda nuestros expertos te asesorarán, tanto en tiendas Kiwoko como por vía telefónica. Y si tienes claro lo que necesitas para tu mascota, puedes realizar tu pedido online en Kiwoko.com, por teléfono o en cualquiera de nuestras tiendas. ¡Te esperamos!
