¿Alguna vez has escuchado a tu perro aullar y te has preguntado, con algo de sorpresa (O incluso preocupación), por qué aúllan los perros? Tranquilo, no eres el único.
Ese sonido largo, profundo y a veces desgarrador, puede pillarte desprevenido, pero es más común de lo que parece. Y aunque en un primer momento no sepas qué está intentando decirte, lo cierto es que el aullido del perro está cargado de significado.
En este artículo te contamos qué puede querer decirte tu peludo cuando lanza ese grito al aire y cómo puedes ayudarle si su aullido tiene detrás alguna necesidad o emoción que debes atender.
¡Vamos a ver qué esconde este tipo de lenguaje!
Un legado ancestral: Por qué los perros aún aúllan
Nuestros perros, aunque hoy se acurruquen en el sofá con nosotros, siguen llevando en su ADN huellas muy claras de sus antepasados: Los lobos. Y uno de esos legados es el aullido.
En la naturaleza, los lobos aúllan para marcar territorio, reencontrarse con su manada o alertar de un peligro. Así que sí, el aullido del perro tiene raíces profundas y sigue funcionando como una herramienta de comunicación.
Si tu perro aúlla, no siempre es motivo de alarma. Muchas veces es simplemente su forma natural de expresarse. Pero, claro, también puede estar indicando algo más. Vamos a ver qué.
¿Qué significa cuando un perro aúlla?
Aquí viene lo interesante. Porque no todos los aullidos significan lo mismo. Si alguna vez te has preguntado por qué aúllan los perro, estas son algunas de las razones más comunes:
Está reaccionando a sonidos
Es muy habitual que un perro aullando lo haga en respuesta a sonidos agudos como una ambulancia, un timbre o incluso ciertas canciones. No es que quiera formar un grupo musical contigo (Aunque a veces lo parezca), es que esos tonos activan su instinto. Es como si escuchara otro aullido en la distancia y contestara.
Se siente solo
Uno de los motivos más frecuentes es la ansiedad por separación. Si tu perro aúlla cuando te vas de casa o se queda solo mucho rato, probablemente esté diciendo: “¡Vuelve, te echo de menos!”.
En estos casos, puedes ayudarle con juguetes para perros que lo mantengan entretenido y productos relajantes como difusores de feromonas.
En Kiwoko tenemos varias opciones que pueden convertirse en tus grandes aliadas (Y en las suyas también).
Busca atención
A veces no hay más misterio: Tu perro quiere tu atención. Y si ve que al aullar consigue que vayas a ver qué le pasa, lo seguirá haciendo. ¿Solución? Refuerza los comportamientos tranquilos y no le premies involuntariamente cuando aúlla sin motivo claro.
En su lugar, ofrécele tiempo de calidad, juego, caricias o incluso un paseo más largo de lo habitual. Muchas veces solo necesitan quemar energía.
Puede estar sintiendo dolor
Aquí es donde debemos ponernos en alerta. Si el aullido es distinto, más quejumbroso o aparece de la nada, puede que esté intentando decirte que algo le duele. Observa si hay otros síntomas como cojera, apatía o cambios en su apetito. Y si tienes dudas, consulta siempre con tu veterinario. Ellos tienen el súper poder de entender lo que tu perro no puede explicar con palabras.
Te está diciendo que te quiere
Si tu perro aúlla cuando llegas a casa, meneando el rabo y con cara de felicidad, ¡Felicidades! Ese es su modo de decirte que te quiere un montón. Y nosotros no podemos más que derretirnos con esos momentos.
¿Por qué unos perros aúllan más que otros?
No todos los perros aúllan con la misma intensidad ni frecuencia.
Hay razas que tienden más a hacerlo, como por ejemplo los Huskies, los Beagles o los Basset Hound. Pero más allá de la raza, influyen otros factores como el entorno, su historia personal o cómo se ha socializado.
Si tu perro ha vivido situaciones de abandono o estrés, es más probable que el aullido sea su forma de gestionar la inseguridad.
Y también, por qué no decirlo, hay perros que simplemente disfrutan aullando. Les gusta el sonido, les relaja, o se emocionan cuando tú cantas (Aunque no des una con la nota, él te sigue).
¿Has probado a grabarlo cuando lo hace? Muchos tutores descubren que sus peludos son verdaderos tenores.
¿Qué puedo hacer si mi perro aúlla mucho?
Primero: calma. Un perro aullando no es una emergencia... Pero tampoco conviene ignorarlo. Aquí lo importante es observar: ¿Cuándo lo hace? ¿Qué lo provoca? ¿Cómo se comporta antes y después del aullido?
Una vez tengas algo de información, puedes actuar. Por ejemplo:
- Si es por soledad, puedes dejarle un porta golosinas para perros, encender la radio para que no esté en silencio total, o incluso probar con una manta calmante para que se sienta más seguro.
- Si reacciona a sonidos externos, prueba a cerrar ventanas o crearle un refugio donde se sienta protegido. Muchos perros encuentran alivio en tener su propio “rinconcito seguro” en casa. Para ello, es importante que le proporciones una habitación silenciosa, con su cama para perros, y su juguete favorito para que se sienta seguro. Y por supuesto ¡No olvides darle muchos mimos! Además, te recomendamos que mires nuestro artículo “Técnicas de relajación para perros para las épocas de más ruido”
- Si sospechas de ansiedad, puedes probar con productos que sean relajantes, como por ejemplo las feromonas para perros.
- Y si el problema persiste, un etólogo o educador canino profesional puede darte pautas adaptadas a tu caso. Porque cada perro necesita una respuesta diferente.
En resumen, saber por qué aúllan los perros te permite comprender mejor a tu compañero de vida. Porque detrás de cada sonido hay una emoción, un mensaje, una necesidad o simplemente... un “hola, estoy aquí”.
Presta atención, responde con cariño, y si puedes, ayúdate de productos que faciliten su bienestar emocional y físico.
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