¿Cómo saber si tu gato está deshidratado?

No hace falta ser veterinario para detectar si un gato está deshidratado. Si bien es cierto que los síntomas de deshidratación en gatos tienden a ser sutiles, sobre todo al inicio de un cuadro de deshidratación, los métodos para detectarlos son fáciles de aplicar. Como consecuencia, basta con tener algo de paciencia para ponerlos todos en práctica y tener una valoración más certera de si el gato está o no deshidratado.

En cualquier caso, no se trata de algo identificable a simple vista, a menos que el problema haya escalado a tal punto de convertirse en un caso muy serio, donde la salud general del felino se ve fuertemente comprometida. Por eso, aplicar todos los métodos para detectar la deshidratación en los gatos es algo que debe hacerse periódicamente.

Síntomas de gato deshidratado

Muy pocos propietarios se preguntan sobre los niveles de hidratación de sus felinos, porque erróneamente consideran que los gatos siempre estarán bien, dada su capacidad para ser autosuficientes e independientes.

Lo ideal es mantenerse al tanto de los posibles síntomas de una deshidratación gatuna cada cierto tiempo y fomentar que beban más agua, sobre todo durante los meses de mayor calor. En este sentido, es bueno aprender a reconocer cuáles son los principales síntomas de esta afección, de manera que se actúe en consecuencia con la mayor brevedad posible.

¿Cómo saber si mi gato está deshidratado?

Un cuadro de deshidratación severo puede ser mortal para los gatos, pero por suerte detectar la falta de agua en una etapa temprana es posible por medio de los siguientes síntomas y recomendaciones:

Elevado nivel de CTR o sequedad en las encías

El CTR, o Tiempo de Llenado Capital, se refiere a la rapidez con que los vasos sanguíneos vuelven a llenarse de sangre en una determinada zona que haya sido privada de su flujo normal.

El método para detectar este síntoma consiste en presionar con un dedo la encía del gato durante unos segundos, hasta notar que se vuelve blanca. Si después de liberar la presión, la zona tarda mucho tiempo en volver a colorarse, podría ser un indicio de deshidratación.

Adicionalmente, es importante reconocer que, en los casos más extremos, basta con ver que la encía se encuentre muy reseca para sospechar que el felino está padeciendo un cuadro de deshidratación.

Mayor ritmo cardíaco y menor temperatura

Si el ritmo cardíaco de tu gato está más acelerado de lo normal, incluso en un momento donde se encuentra completamente tranquilo, también debe tomarse como posible indicio de una deshidratación.

A su vez, este síntoma conlleva a la aparición de otro que puedes comprobar tocando las patas del animal, y si estas se encuentran mucho más frías de lo habitual o más que el resto del cuerpo, es momento de estar alerta para evitar que el problema siga escalando.

Pérdida de elasticidad en la piel

Un síntoma que no es tan fiable para el caso de los gatos ancianos, se puede detectar poniendo a prueba la elasticidad de la piel. Para ello, basta con pellizcar ligeramente una sección del lomo, y si la piel tarda mucho en reponerse y volver a su forma original, puede que una deshidratación esté perjudicando la elasticidad de la misma.

En los casos más avanzados, es suficiente con identificar si la piel se encuentra muy seca.

Falta de lubricación y brillo en los ojos

Esos ojos brillantes que caracterizan a los gatos son una buena manera de saber que se encuentran bien hidratados y saludables. Por ello, la falta de dicho brillo y lubricación ocular, muchas veces puede ser un síntoma de que un cuadro de deshidratación está en proceso.

Pérdida del apetito y jadeos recurrentes

Por último, están los síntomas menos deseados, ya que su manifestación es indicio de una deshidratación muy avanzada, que ha mermado los sistemas internos del gato, afectando así su apetito y ánimo general.

En cuanto a los jadeos, hay que tener claro que es algo bastante común en perros saludables, pero nunca en gatos, por lo que este síntoma implica una atención urgente por el veterinario.

¿Cómo prevenir la deshidratación?

Las molestias para tu gato y momentos desagradables para ti se pueden evitar aprendiendo a prevenir la deshidratación gatuna. Para ello, hay que tener en cuenta una serie de trucos y consejos para mantener a un gato bien hidratado:

  • Complementar su dieta con pienso húmedo.
  • Instalar una fuente de agua para gato, ya que el movimiento les resulta más atractivo.
  • En sintonía con lo anterior, abrir el grifo durante unos segundos también puede ser una buena idea para que beba más agua.
  • Poner bebederos en varios puntos de la casa para que tenga fácil acceso al agua donde sea que se encuentre.
  • Cambiar el agua de los bebederos con cierta frecuencia, de modo que siempre esté fresca y le resulte más apetecible.

¿Cómo hidratar un gato que no quiere beber agua?

La comida húmeda es sin dudas una de las mejores formas de aportar mayores niveles de líquido al felino. Del mismo modo, en lugar de mantener los comederos siempre llenos, lo mejor es dosificar el pienso en pequeñas cantidades para que coma varias veces al día, así su instinto natural lo impulsará a beber agua tras cada comida.En cualquier caso, pese a que es relativamente común que un gato consuma poca agua, no es para nada normal que deje de beber por completo. En estos casos, lo mejor es llevarlo a consulta veterinaria para descartar cualquier otro problema subyacente.

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